¿Qué es externalidad negativa y positiva en economía?

Ejemplos de externalidades positivas

En economía, una externalidad es un efecto secundario, positivo o negativo, de la producción o el consumo. Se produce cuando el impacto de la actividad repercute en terceros que no participan en ella.

Una ilustración común de una externalidad negativa es la de la contaminación ambiental. Supongamos que soy el propietario de una fábrica que fabrica y vende widgets, y acabo contaminando un arroyo cercano con los residuos de mi proceso de fabricación de widgets. El impacto de esta contaminación no lo sentimos ni yo ni mis clientes, pero es una externalidad negativa para los vecinos de mi fábrica, que sufren las consecuencias del arroyo ensuciado por los widgets.

Las externalidades son un ejemplo de desequilibrio en el mercado libre, porque el coste de una externalidad negativa lo paga alguien ajeno a la actividad económica y no se refleja en el precio de la producción. El gobierno suele mitigar el desequilibrio que representa una externalidad negativa gravando al productor. Al imponer impuestos a las fábricas que no cumplen determinadas normas de emisión, el gobierno puede incentivar a las fábricas a invertir en las mejoras necesarias de su capital físico para que cumplan esas normas de emisión.

Externalidad positiva del consumo

¿Alguna vez has tenido la sensación de estar pagando el precio del “negocio” de otra persona? Tal vez se esté ahogando con la contaminación de una fundición en la que se fabrican widgets baratos. Ese efecto indirecto se llama externalidad. También las hay positivas. Aprenda más sobre las externalidades en este episodio de la serie de podcasts Economic Lowdown.

Cuando los mercados funcionan bien, todos los costes y beneficios de una transacción de un bien o servicio son absorbidos por el comprador y el vendedor. Por ejemplo, cuando compramos un donut en la tienda, es razonable suponer que todos los costes y beneficios de la transacción quedan contenidos entre el vendedor y usted, el comprador. Sin embargo, a veces, los costes o beneficios pueden repercutir en un tercero que no participa directamente en la transacción. Estos costes y beneficios se denominan externalidades. Una externalidad negativa se produce cuando un coste se desborda. Una externalidad positiva se produce cuando se desborda un beneficio. Por lo tanto, las externalidades se producen cuando algunos de los costes o beneficios de una transacción recaen en alguien que no es el productor o el consumidor.

Externalidades medioambientales

Uno de los métodos que podemos utilizar para controlar las externalidades es la internalización de las mismas. Por ejemplo, los métodos incluirán los impuestos del gobierno y el aumento de los precios de los bienes de mérito para que se produzcan menos externalidades negativas.

Las actividades que aportan beneficios a terceros provocan externalidades positivas. Por ejemplo, el consumo de educación. No sólo beneficia al individuo, sino también a otras personas. Un individuo educado podrá educar a otras personas, cometer menos delitos, conseguir un trabajo mejor pagado y pagar más impuestos al gobierno.

Las actividades que suponen un coste para terceros provocan externalidades negativas. Por ejemplo, la contaminación producida por las empresas causa externalidades negativas, ya que afecta negativamente a las comunidades al causarles ciertos problemas de salud.

Un ejemplo de causa de externalidad positiva es el consumo de educación. Un individuo no sólo recibirá beneficios privados, como tener más conocimientos y conseguir un mejor trabajo. También podrá educar a otras personas, cometer menos delitos, conseguir un trabajo mejor pagado y pagar más impuestos al gobierno.

Ejemplo de externalidad de producción positiva

Existen dos tipos de externalidades: positivas y negativas. Las externalidades positivas se refieren a los beneficios que obtienen las personas ajenas al mercado debido a las acciones de una empresa, pero por las que no pagan ninguna cantidad. En cambio, las externalidades negativas son las consecuencias negativas que sufren las personas ajenas a la empresa debido a sus acciones y por las que el mercado no cobra nada.

Las externalidades son un tipo de fallo del mercado, es decir, la incapacidad del mercado para valorar adecuadamente todas las consecuencias de las acciones económicas. Surge porque es imposible o inviable determinar el precio de la externalidad y/o no existe ningún mecanismo para cobrarla. Pensemos en una empresa a la que el gobierno autoriza a construir y explotar una línea de transporte urbano en su ciudad. La empresa paga por el terreno que compra e incurre en todos los costes relacionados con la construcción, pero no hay forma de compensar a los residentes que viven cerca por el ruido y las molestias que sufren debido a las actividades de construcción. Esto representa externalidades negativas. Sin embargo, una vez que la línea de transporte masivo está operativa, los que viven cerca son los más beneficiados, no sólo por la disminución del tiempo de viaje, sino por la apreciación del valor de mercado de sus propiedades. Estas son las externalidades positivas. Son el resultado de la desviación entre los beneficios privados y los beneficios sociales y entre los costes privados y los costes sociales de las distintas actividades económicas.

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